143. MIS TRÍOS CON MANU

Manu es mi amante más especial. Aunque mi marido Luis sabe de su existencia, también sabe que Manu solo es cosa mía. Fue Manu quien me introdujo en el mundo liberal cuando yo me acababa de divorciar y además le conocí antes que a Luis, motivos por los cuales mi marido queda al margen de esta historia. Él lo comprende.

Hubo un momento, al principio de mi relación con Manu, en el que llegué a plantearme la posibilidad de que fuésemos pareja no solo sexual, pero pronto abandoné esa idea: Manu es imparable y es, con diferencia, el hombre más procaz que conozco. Y lleva un ritmo imposible de seguir: tiene más de una cita semanal con distintas mujeres, se mete a menudo en un club liberal cerca de su casa y está apuntado a todas las páginas de contactos posibles. Si alguna se atreve a ser pareja de Manu que me lo cuente.

A Manu no solo le debo que me acompañase en mi entrada al mundo liberal. También me inició en prácticas que eran desconocidas para mi: con él hice la primera lluvia dorada, el primer bondage, la primera gang bang y los primeros tríos. Manu es un fanático del trío (dice que se aburre en pareja). De modo que, en uno de esos primero tríos, me llevé mi primera doble penetración y experimenté lo que es una doble vaginal.

Cuando suena el teléfono y veo que llama Manu, ya se de antemano que me va a proponer alguna nueva fantasía. Y siempre le respondo que sí, ya que jamás tendría un "no" para él.

La última vez que me llamó, sin embargo, algo cambió. Me contó que había quedado con una chica trans, y que llevaba mucho tiempo detrás de una cita así, ya que Paula (ese es el nombre de la trans) es distinta de las demás transexuales que ha conocido. 

-No sabía de tu faceta bísex -le dije.

Cierto: incluso en los tríos con Manu y otro hombre, en Manu jamás vi el más mínimo atisbo de comportamiento bisexual más allá del hecho compartir a una mujer con otro hombre. De modo que su interés por estar con una trans me sorprendió.

-Por eso mismo quiero que participes tu, Maite, y que estés conmigo.

El día de la cita me presenté en casa de Manu con antelación y con mis mejores ropitas sexys, pero cuando llegué Paula ya estaba allí. Me encontré con una trans super atractiva, rubia y muy femenina. Como no podía ser de otra manera, Paula y Manu ya estaban en acción. Manu estaba desnudo y erecto, y Paula solo llevaba un sujetador blanco de encaje muy bonito.

-Ven cariño -me dijo Paula- Vamos a chupársela juntas.

Me arrodillé al lado de Paula y empecé a lamer el pene gordote de Manu. Mi lengua y la de Paula se iban encontrando. Pero enseguida me di cuenta de que Manu prefería la boca de Paula, de modo que al final decidí apartarme y dejarles a su rollo. Manu tardó muy poco en tumbar a Paula encima del sofá y empezar a penetrarla, completamente enloquecido de placer.

A mi me supo mal no participar, pero a la vez no quería interrumpir su momento. Así que me las apañé para chupar el pene de Paula, que está muy bien dotada y estaba muy duro mientras Manu le daba caña. Al cabo de un rato me di cuenta de que yo no pintaba nada en aquel trío y me retiré. Estaba un poco dolida por ese desprecio y me senté en el sofá, a masturbarme con calma mientras les oía jadear.